¿Tenemos que obedecer leyes espirituales?

Se podría decir que Dios es quien creó las leyes espirituales. Pero sería más correcto decir que Dios son leyes espirituales. Son amables y cariñosos, y nos permiten elegir si seguirlos o no. Más bien, podemos elegir cuánto dolor queremos tolerar.