Guardamos secretos, incluso de nosotros mismos. Antes de darnos cuenta, comenzamos a fingir que no creemos que esta parte ni siquiera exista. Esta es la mentira de nuestra vida.
Cegado por el miedo
5 Renunciar a nuestra lucha llena de miedo para guardar nuestros secretos
carga
/
Algunos que hacen este trabajo de autoconocimiento encuentran rápidamente sus partes íntimas y ocultas. Los marcan, aceptan charlar y trabajan para superar sus miedos. Luego caminan hacia el mundo como una persona libre.
Algunos que hacen este trabajo de autoconocimiento encuentran rápidamente sus partes íntimas y ocultas. Los marcan, aceptan charlar y trabajan para superar sus miedos. Luego caminan hacia el mundo como una persona libre.

Nuestro mayor gozo en la vida proviene de dar, en la medida en que podamos. Viene de alcanzar nuestro potencial, podríamos decir. Por otro lado, nuestro mayor dolor se deriva de no alcanzar todo nuestro potencial para dar a los demás y a la vida. Todos los demás dolores y frustraciones provienen de este dolor de no ofrecer lo que tenemos para dar. Dando la vuelta a esto, todo el placer y la satisfacción fluyen de dar libremente, sin ningún tipo de problema.

Entonces, ¿por qué somos tan tacaños? ¿Por qué nos negamos a dar libremente de nosotros mismos? Esto se debe a nuestro miedo a las partes de nosotros mismos que aún no vemos ni conocemos, lo que crea patrones que siguen fragmentando el dolor.

Y mientras mantengamos esas partes ocultas, no seremos libres. Nos convertiremos en un pretendiente que siempre está en guardia. Esto significa que dondequiera que estemos albergando distorsiones en nuestro interior, estamos viviendo una mentira. Y nada de esto tiene que suceder. Es una mentira innecesaria que vivimos basándonos en un falso miedo a nosotros mismos. 

Algunas personas, cuando comienzan a hacer este trabajo de autoconocimiento, encuentran sus partes íntimas y ocultas con bastante rapidez. Los marcan, aceptan tener una charla y pasan directamente a superar sus miedos, saliendo al mundo como una persona libre. Pero otros, incluso algunos que tienen las mejores intenciones externas de encontrarse a sí mismos, esquivan el problema y no llegan a ninguna parte. Tienen esta vaga esperanza de poder llegar hasta casa sin tener que exponer y limpiar hasta el último trapo sucio interior. 

La pregunta es, ¿estamos listos para dejar de vivir la "gran mentira"? ¿Estamos listos para dejar ir toda esta pretensión? Es una decisión difícil. Realmente es una batalla, y importa mucho si ganamos esta. Con este fin, veamos de dónde proviene este miedo ilusorio de uno mismo y, lo que es más importante, descubramos qué sucede si, en lugar de superarlo, lo mimamos.

Escuche y aprenda más.

Cegado por el miedo: Perspectivas de la guía Pathwork® sobre cómo enfrentar nuestros miedos

Leer: Renunciar a nuestra lucha llena de miedo para proteger nuestros secretos